domingo, 7 de marzo de 2010

DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER TRABAJADORA

Hoy, 8 de marzo se celebra el día de la mujer trabajadora. El Día Internacional se celebra como homenaje a la muerte de 149 mujeres en la fábrica Cotton de Chicago, víctimas en 1908 de un incendio provocado por el patrón cuando las empleadas, encerradas en la factoría, reivindicaban mejoras laborales y equiparación salarial con los hombres. Tres años después se celebró, por primera vez, el Día de la Mujer Trabajadora en Alemania, Austria y Suiza, mientras que en España transcurrieron 66 años hasta que el movimiento feminista lo logró.
Cada vez es mayor el número de mujeres que trabajan en España. Desde 1985 se han incorporado al mercado laboral cerca de 2,2 millones de mujeres. El año pasado en España por primera vez hubo más afiliaciones femeninas que masculinas en la Seguridad Social.
Pero un informe de Naciones Unidas afirma que en nuestro país las obreras están peor pagadas (hasta 34 puntos porcentuales de diferencia) con relación a los hombres. También en Europa las obreras cobran un 26% menos que los hombres.
Las actividades económicas de las mujeres siguen centrándose fundamentalmente en formas de empleo precarias caracterizadas por escasa remuneración y baja productividad; mientras que los hombres acaparan los puestos de mayor retribución.
Aunque el camino recorrido ha sido muy importante todavía queda mucho por conseguir a la mujer, ser reconocida para puestos importantes dentro tanto de la empresa privada como de la Administración Pública y que no sea un caso aislado que una mujer dirija una empresa, que sea un alto cargo en el Gobierno o en otros estamentos de poder. Aunque esto ocurra en los países desarrollados hay países en los que la situación de la mujer sigue siendo de gran precariedad tanto en lo laboral como en lo personal, siendo consideradas personas de segunda sin ningún tipo de derecho en el terreno laboral, teniendo que desarrollar aquellos trabajos en situación muy precaria y con una escasa remuneración económica. En algunos países incluso el hombre aún prohíbe a la mujer el trabajar fuera de la casa, limitando un derecho indiscutible de toda mujer.
Esperemos que algún día todas las mujeres en todos los lugares puedan elegir libremente que trabajo desarrollar, y que este sea tan valorado, tanto económicamente como socialmente como el del hombre. Por eso apoyamos la política de igualdad y de discriminación positiva que está llevando a cabo el Partido Socialista en todas las instituciones que gobierna y por supuesto la existencia del ministerio de Igualdad, ya que además de elaborar leyes tan importantes como la del aborto y potenciar la igualdad, es un símbolo de nuestra política.


Paula Rojo García, secretaria de Igualdad y Movimientos Sociales